Nuestra gama de Bombas de calor

La bomba de calor para piscinas es un sistema de calefacción eficaz y respetuoso con el medio ambiente. Utiliza los recursos energéticos presentes en el aire para elevar la temperatura del agua de la piscina. El funcionamiento de la bomba de calor para piscinas se basa en los principios de la termodinámica, que facilitan la transferencia del calor de un medio a otro.

¿ Cómo funciona una bomba de calor para piscinas ?

Una bomba de calor para piscinas se compone de varios elementos esenciales: un evaporador, un compresor, un condensador y un regulador de presión. El evaporador sirve para captar las calorías presentes en el aire y transferirlas a un fluido refrigerante que, a continuación, se evapora. Por medio del compresor, este gas frigorífico se comprime, lo que eleva su temperatura. Cuando pasa por el condensador, el fluido cede su calor al agua de la piscina en circulación en el intercambiador de calor. Para terminar, el regulador de presión reduce la presión del fluido y le permite volver a comenzar el ciclo.

¿ Qué ventajas tiene el uso de una bomba de calor en la piscina ?

Las ventajas de una bomba de calor para piscinas son numerosas. Este equipo permite prolongar la temporada de baño calentando el agua; así se puede aprovechar la piscina mucho más tiempo. Este dispositivo también ofrece una eficiencia energética notable en comparación con otros sistemas de calefacción para piscinas, lo que se traduce en ahorros sustanciales en la factura de la luz o el gas.

Además, las bombas de calor son más respetuosas con el medio ambiente. Explotan las fuentes de energías naturales presentes en la naturaleza y producen entre 4 y 5 veces más energía de la que consumen. En consecuencia, son consideradas un sistema de calefacción ecológico para la piscina.

Asimismo, las bombas de calor para piscinas suelen ser fáciles de instalar y utilizar. La durabilidad de las bombas de calor es aún más importante porque necesitan poco mantenimiento. Además, permiten controlar con precisión la temperatura del agua, para poder ajustar la calefacción de la piscina en función de las distintas necesidades.

La instalación de una bomba de calor para piscinas debe realizarla un profesional cualificado para garantizar un funcionamiento óptimo y la conformidad con las normas de seguridad. Este profesional tiene en cuenta los siguientes aspectos para instalar correctamente el equipo.

Evaluación de las necesidades

El instalador evalúa el tamaño de la piscina, el clima de la zona, las especificidades del sistema de filtración y de otros factores que determinan la potencia y el tipo de bomba de calor que se adapta a las necesidades de cada caso.

Selección de la ubicación

El técnico elige un lugar apropiado para colocar la unidad exterior de la bomba de calor. El punto elegido debe permitir una buena circulación del aire y facilitar el acceso para realizar el mantenimiento.

Instalación de los conductos

A continuación, el instalador procede con la conexión de la bomba de calor al circuito hidráulico de la piscina. Para ello, pone conductos de agua entre la bomba de calor y el sistema de filtración.

Conexión eléctrica

La bomba de calor necesita una alimentación eléctrica específica que cuente con un disyuntor de reversión de corriente para garantizar la seguridad. Le corresponde a un electricista cualificado encargarse de conectar la bomba de calor a la red eléctrica de conformidad con la normativa vigente.

Puesta en marcha y ajustes

Al finalizar la instalación física, el profesional pone en marcha la bomba de calor, realiza los ajustes necesarios y comprueba que funcione bien.

¿ Cómo elegir la bomba de calor en función de la piscina ?

La elección de una bomba de calor para piscinas depende de varios factores. El primero es el tamaño de la piscina, ya que este determinará la potencia que debe tener el equipo. Una bomba de calor que no alcance el mínimo requerido no estará en condiciones de calentar de manera eficaz el agua, mientras que una bomba de calor demasiado grande podría provocar un consumo energético excesivo.

La temperatura exterior influye en el funcionamiento de la bomba de calor. Si se vive en una zona en la que los termómetros marcan temperaturas negativas en invierno, conviene elegir un modelo que pueda resistir climas extremos. En ese caso, hay que elegir un COP (coeficiente de rendimiento) elevado para disminuir el consumo de energía.

Las piscinas elevadas y las piscinas enterradas tienen necesidades distintas cuando hablamos de calefacción. Por ello, hay que asegurarse de elegir una bomba de calor que se adecue al tipo de piscina que se tenga. Por último, conviene elegir una bomba de calor que cuente con funcionalidades avanzadas como los modos de funcionamiento y los sistemas de descongelación automática.

El consumo de una bomba de calor para piscinas depende de varios parámetros clave. Entre ellos, merece la pena mencionar especialmente la capacidad de la bomba de calor, las condiciones climáticas exteriores, el ajuste de la temperatura de referencia del agua de la piscina y la duración del funcionamiento. Hay que dar preferencia a un modelo que tenga una eficiencia energética elevada para minimizar el consumo de electricidad. Una bomba de calor eficaz permitirá optimizar el uso de la energía al tiempo que se mantiene una temperatura del agua adecuada para la piscina.

También se puede reducir el consumo del dispositivo de la bomba de calor de varias formas: aislando correctamente la piscina, instalando una cubierta de lona para reducir las pérdidas de calor y programando el funcionamiento de la bomba de calor durante las horas valle.

El mantenimiento de la bomba de calor

Para garantizar un buen funcionamiento y prolongar su vida útil, es importante realizar un buen mantenimiento de la bomba de calor. Hay que realizar periódicamente las siguientes operaciones:

• Limpiar con regularidad el evaporador de la bomba de calor.
• Comprobar periódicamente los niveles de presión y de fluido refrigerante de la bomba de calor, tomando como referencia las recomendaciones del fabricante.
• Comprobar que la unidad exterior de la bomba de calor esté libre de obstáculos que puedan afectar a la circulación del aire.
• Realizar controles periódicos de las conexiones, para asegurarse de que están bien apretadas y en buen estado.
• Recurrir una vez al año a los servicios de un profesional cualificado. Este realizará un mantenimiento completo, verificará el rendimiento de la bomba de calor y limpiará el circuito frigorífico, si fuese preciso.